sábado, 6 de junio de 2009

El verdadero Padre de la Patria


"Si queremos que todo siga como está, es necesario que todo cambie". 

El gatopardo. Novela de Lampedusa. 


A principios del siglo XIX España estaba ocupada por Francia cuyo emperador Napoleón Bonaparte había impuesto en el trono de ese país a su hermano José;  mientras  tanto el heredero legítimo Fernando VII se encontraba exiliado. Debido a esto se formo un vacío de poder en las colonias que aprovecharon los virreyes la burguesía y el alto clero  para gobernar de acuerdo a sus intereses; aunado a esto había descontento e inquietud en la Nueva España por diversas causas.

-Resentimiento de los criollos hacia los españoles que acaparaban los altos puestos en el gobierno y en la iglesia.

-Las ideas liberales circulaban  en las logias masónicas y la Independencia de Estados Unidos y su consecuente progreso se veían como ejemplo a seguir.

-La corrupción del alto clero y la nobleza eran evidentes.

-Los excesos de trescientos años de virreinato; las altas cargas impositivas, y la centralización del intercambio comercial con el mundo que se hacía a través de España, impedían el progreso de  los grupos sociales emergentes.

-Las reformas borbónicas y la expulsión de los jesuitas de las colonias provocaron resentimientos en el pueblo y afectaron a la Iglesia en especial al bajo clero.

 Por esas razones  se empiezan a gestar en la Nueva España conspiraciones que pretendían reivindicar la idea de un cambio político y social. El cura Miguel Hidalgo pertenecía a uno de esos grupos, por lo que al verse descubierto por el gobierno se ve obligado a llamar a las armas al pueblo de Dolores donde era párroco el día 16 de Septiembre de 1810.

A Hidalgo se le conoce como el padre de la patria en México pues si bien su llamado a las armas no buscaba en un principio la independencia, prendió la mecha para que sus sucesores reclamaran la separación de España.  Tanto Hidalgo como su sucesor el cura Morelos tuvieron triunfos en el campo de batalla; pero en la primera parte del movimiento fueron capturados y ejecutados. Después de diez años de insurgencia el movimiento se sostenía principalmente por la lucha del General Vicente Guerrero que más que liberador era en ese momento solo de resistencia.

 Mientras tanto España había expulsado a José Napoleón y el heredero Fernando VII había regresado a ocupar el trono, la intención de los liberales españoles era que firmara la constitución que se había redactado en su ausencia, que si bien no era del todo progresista le ponía coto al poder de la Iglesia y la Corona. El rey se negó a hacerlo, pero para 1820 el sector liberal lo presionó al grado de tener que aceptar regirse por esas leyes.

Esto le sentó pésimo al alto clero de la Nueva España, porque entre otras cosas la constitución de Cádiz, eliminaba el fuero de los sacerdotes, garantizaba la libertad de prensa, suprimía el Santo Oficio y desamortizaba sus propiedades. Asimismo la nobleza, los propietarios de minas, los comerciantes y el ejército asumieron que eventualmente los cambios en España iban a afectar también sus privilegios. Por tanto se empezó a formar un grupo de conspiradores alrededor del canónigo Matías de Monteagudo –inquisidor honorario que presidió el juicio y tortura de Morelos-. Este personaje bien pudiera ser llamado el padre de la patria,  ya que a la cabeza de la más alta jerarquía eclesiástica del país, sostuvo en el templo de La Profesa en octubre de 1820 una serie de reuniones para impedir que la Constitución de Cadiz, que ya había sido promulgada por el virrey empezara a regir en la Nueva España.

En esas reuniones a puerta cerrada se estableció que a pesar de haber jurado subordinación a la corona española  su prioridad era mantener los privilegios de la iglesia católica, así que decidieron tomar la idea de independencia de los insurgentes y manipularla a su favor. Eventualmente el plan gestado en La profesa fue llevado a cabo dando paso a la independencia de México. Una nación que empezaba con  la misma sanguijuela pegada al cuerpo que la había estado sangrando durante trescientos años de coloniaje.

 En mi próxima entrada abordaré el tema del personaje que eligió el alto clero para ejecutar su plan y de cómo fue nombrado primer emperador de México. 

martes, 2 de junio de 2009

Un matrimonio pelea por dinero


Deus nobiscum, quis contra?

i Dios está con nosotros! ¿Quién puede estar en contra?".
(Romanos, 8,31)

Se había mencionada que a lo largo del período colonial en México la Iglesia Católica alcanzó gran poderío económico al establecer el primer sistema bancario encargado de otorgar créditos y administrar herencias. Asimismo empleando la usura y otros métodos como las “donaciones piadosas” se fue apoderando de la mayor parte de la propiedad inmobiliaria del país.

Por otro lado la corona española se beneficiaba de la estabilidad de las colonias y la ausencia de disturbios que mediante el control de las conciencias le proporcionaba la curia católica; en otras palabras era una relación de mutuo beneficio; el poder temporal aliado con el espiritual en una empresa común, sacar el mayor provecho de los territorios ultramarinos.

Esta relación simbiótica funcionó razonablemente bien durante los primeros doscientos años del virreinato, sin embargo en el año 1700 la corona española hasta entonces gobernada por la casa de los Habsburgo es sustituida por los Borbones de tradición más liberal que al llegar al poder descubren que los cambios modernizadores que transformaban a Europa no habían tenido cabida en España, y en el siglo XVIII estaban en desventaja económica y tecnológica respecto del resto del mundo occidental.

En otras palabras estamos diciendo que la España de esa época estaba en franca decadencia económica; ahora bien esta afirmación hay que ponerla en perspectiva. Aunque no hay datos fidedignos de los embarques de oro y plata que llegaban a España de sus colonias; es evidente que desde el siglo XVI cantidades importantes de éstos metales eran enviadas periódicamente. Para el historiador J. Earl Hamilton se podría hablar de Trescientos mil kilos de oro y veinticinco millones de kilos de plata.

Así pues ¿Dónde donde estaba esa riqueza? Un economista moderno diría que a España le cayó el Mal Holandés, la repentina entrada de ingresos le trajo a la larga casi más problemas que beneficios.

El deseo de atesorar y valorizar el oro de las Indias se vio prontamente frustrado, debido a que la escasa producción nacional hacía indispensable la importación de bienes desde otras naciones, lo que condujo a tener que utilizar los metales preciosos para pagar el saldo negativo de la balanza comercial y los empréstitos que los reyes obtenían para financiar la hegemonía política y militar. Así, los beneficiarios finales del mercantilismo español fueron los financieros y comerciantes extranjeros. Ya las Cortes de 1588 a 1593 lo habían registrado: "Con poder estar (nuestros reinos) los más ricos en el mundo oro y plata en ellos ha entrado y entra de las Indias están los más pobres porque solo sirven de puente para pasarlos a los otros Reinos nuestros enemigos y de la Santa Fe Católica."

Inflación, nula producción y sin fuentes de trabajo, ya que al no existir empleo bien remunerado en la agricultura, y muy poco o ninguno en la industria o el comercio, la población española terminó empleándose en la Administración Pública o en órdenes religiosas. A fines del siglo XVIII, los empleados estatales eran la quinta parte del censo y un 30% de los españoles formaban parte del clero o de órdenes religiosas, o vivían a expensas de la Iglesia Católica.

Así pues, la dinastía Borbónica llega a gobernar la España de principios del XVIII y se encuentra con éste panorama por lo que inmediatamente tiene que imponer reformas que iban a afectar los privilegios de la Iglesia. Las nuevas leyes pretendían afirmar el poder secular sobre el religioso, y ésto incluía la restricción de los privilegios y exoneraciones fiscales que gozaban las órdenes católicas y el alto clero. Fueron los jesuitas los que más se opusieron al proyecto centralizador de los borbones, por lo que fueron expulsados de España y sus posesiones ultramarinas en 1767. A la larga la corona española perdería la posesión de sus colonias no tanto por el deseo de sus habitantes de independencia sino por la oposición del clero a que le tocaran sus bienes y privilegios.

La imagen corresponde al escudo de armas de Felipe V primer rey Borbónico de España.

viernes, 29 de mayo de 2009

Tres siglos de oscuridad


La iglesia quiere pasar a la historia como la gran catequizadora  y divulgadora del evangelio-en México-. No quiere que se le reconozca como la institución maldita que derrocó  gobiernos, que dio golpes de Estados, que financió revoluciones  y guerras civiles en contra de los gobiernos liberales cuando éstos apuntaban a los bienes del clero.

        Francisco Martín Moreno. Autor de “México ante Dios”

El día sábado 13 de mayo del año de 1524, pisaron la tierra mexicana, llamada Nueva España, 12 misioneros franciscanos en respuesta a la solicitud del conquistador Hernán Cortés que había pedido a la corona española sacerdotes para catequizar a sus nuevos súbditos. La orden franciscana hacía votos de pobreza y trataba de vivir de acuerdo al modelo de su fundador; no así el resto de los frailes  y sacerdotes que les siguieron cuyo principal objetivo no era catequizar sino medrar con la riqueza de ésta tierra y el trabajo de sus habitantes.  Oficialmente la edad Media termina con el descubrimiento de América y la invención de la imprenta de Gutenberg; eso es válido para Europa. La iglesia y la corona española en conjunto importaron a la Nueva España; el oscurantismo, la cerrazón intelectual, el modelo económico feudalista y en general la ignorancia, la teocracia, y la superstición  de la que estaba despertando el resto del mundo.

 Ciertamente los sacerdotes fundaron algunas escuelas y universidades logrando alfabetizar después de trescientos años al ocho por ciento de la población de las colonias –¡el 8%!-. Esta gente "educada" era un depósito de saber dogmático y ejercía su conocimiento en la administración de los bienes de la iglesia. 

Poco antes de la conquista; Lutero había roto con Roma y había establecido  que la salvación era posible  leyendo la Biblia e interpretándola en lo individual sin la mediación de un sacerdote .  Esta simple declaración estimuló  a que los ciudadanos de los países protestantes tuvieran la obligación moral de aprender a leer.  Un hombre educado que lee no es fácilmente manipulable, y eso lo sabía la Iglesia muy bien, de allí su necesidad de dosificar la educación en las colonias.

En los siguientes 300 años que corresponden a la llamada época de la colonia la Iglesia Católica se apoderó del sesenta y cinco por ciento de la propiedad inmobiliaria, creó su propio sistema bancario; los Juzgados de Testamentos, Capellanías y Obras Pías donde imponía intereses, se benefició de diezmos obligatorios; el cobro por ceremonias y las herencias de la gente que amenazaban con el castigo eterno. Tenía su propia policía y el tribunal del Santo Oficio –Inquisición- para juzgar, condenar y ejecutar a discreción al que se le opusiera, en cambio gozaban de fueros especiales para evadirse de los juzgados civiles. 

- La imagen es el escudo del Santo Oficio en cuyo borde está escrito Salmo 73; del mismo se extrae el siguiente versículo.

Por tanto, la soberbia les sirve de collar; 
y la violencia, como un manto, los envuelve.


 

miércoles, 27 de mayo de 2009

La Guerra Santa


Extra Ecclesiam nulla salus "Fuera de la Iglesia no hay salvación". Bonifacio VIII 1302

Entre 1926 y 1929 se dieron en México levantamientos armados en algunas zonas del país. Los insurgentes luchaban por reivindicar los derechos de la Iglesia Católica como respuesta a un endurecimiento por parte del gobierno en cuanto a la autorización de expresar el culto públicamente, conservar propiedades inmobiliarias y acreditar sacerdotes para ejercer, entre otros privilegios, que si bien no estaban contemplados por las leyes desde el siglo anterior; se habían mantenido como un acuerdo tácito.

La Iglesia Católica se sintió especialmente agredida por ser la más difundida y la que más se veía afectada en sus privilegios, se llegó al extremo de solicitar que los sacerdotes debían ser casados para poder oficiar misa, cosa que se interpretó como un ataque directo a la curia.

Las negociaciones entre partes se endurecieron lo que motivo a algunos grupos a tomar las armas, nutridos principalmente por campesinos de zonas en las que la Iglesia tenía gran influencia, en otras palabras fue un fenómeno no urbano. La jerarquía católica es decir, los obispos y delegados papales aparentemente se desligaron del movimiento, aunque algunos sacerdotes si participaron con recursos, e inclusive con su presencia en el alzamiento.

Una de las razones por las que se dificulta evaluar esta parte de la historia mexicana es que lo documentos y registros  fueron  borrados en lo posible porque el país estaba asimilando las consecuencias de una guerra civil; la Revolución Mexicana, y algunos sectores progresistas –encargados de contabilizar los hechos- veían en el catolicismo un sinónimo de espíritu antirrevolucionario; un lastre para lograr la modernidad anhelada o para cualquier cambio aperturista.

Por otro lado esta suerte de doctrina cristiana invertida en la que era viable matar en el nombre de la religión no era adecuada a los nuevos tiempos a los que se trataba de adaptar la jerarquía católica.

Aquí se puede encontrar claramente un ejemplo de represión institucional y es interesante apreciar como al elegir unos sucesos y desestimar otros una cultura dictamina como desea contemplarse en el espejo de la historia.

El hecho de que la Cristiada, que es como se le llamó al movimiento, no tenga carta cabal de identidad en los registros, no implica que haya desaparecido de la memoria de los mexicanos, especialmente de las zonas afectadas. Todo lo contrario ayudó a configurar en el imaginario de los participantes y sus herederos toda una suerte de cosmología acerca de la lucha entre el bien y el mal. Dios, Cristo, La virgen María y la Iglesia Católica contra El diablo, los comunistas, los Masones, los judíos y el Estado Mexicano. Un universo de blanco y negro; la visión apocaliptica de un mundo maldito que debe incendiarse para que de sus cenizas brote el definitivo, un mundo feliz y en armonía.

La guerra santa, los soldados de Dios, la instauración del Reino de Dios en la tierra, pueden parecer oximorones, lo son de hecho, pero son el intento de conceptualizar el enfrentamiento del laicismo contra la religión en una época en que las fronteras eran indefinidas, difusas.

Esta entrada sirve para resaltar lo siguiente.

-El movimiento Cristero corrió en paralelo con la estructura católica. Los laicos que participaron lo hicieron con la bendición de solo una parte del clero, esto motivo que desde ese momento, se formaran grupos que ya no necesitaron que les marcaran el camino a tomar lo que produjo que se independizaran del sentir de la jerarquía católica, aunque es cierto que no hubo un rompimiento con ésta.

-La memoria histórica del hecho –los documentos- fue borrada, pero no así la memoria de los hombres. Esto ayudó a conformar -como un río subterráneo-, en ciertos grupos involucrados, una visión del universo en la que bien y mal se enfrentaban a muerte en una lucha que aún continua.

-Si bien la rebelión fue aplastada, fue el semillero de los movimientos de derecha que a partir de allí, se encuentran presentes en la historia de México y nutren a los grupos que de unos veinte años a la fecha luchan por incrustarse en el Estado Mexicano para imponernos su manera de ver al mundo.

Son el antecedente de la ultraderecha en México.

lunes, 25 de mayo de 2009

NON FECIT TALITER OMNI NATION*


Nunca como hoy estoy más seguro del engaño y explotación que sufre mi pueblo, a causa de la farsa guadalupana”. Eduardo Sánchez Camacho, obispo de Tamaulipas a finales del S.XIX

Para los que me lean fuera de México la historia de la virgen de Guadalupe patrona de México va más o menos así. Juan Diego era un indio muy devoto que todos los días iba a comulgar, un día -9 de diciembre de 1531-  se le apareció la virgen cuando se dirigía a la iglesia y le pidió que fuera con el obispo y le dijera que ella solicitaba la construcción de un templo en el lugar de la aparición -cerro del Tepeyac- , dice la historia que el indio Juan Diego fue en busca de Fray Juan de Zumárraga, para contarle la petición de la Virgen pero que este no le creyó ; por lo que pidió una prueba y en respuesta se dice que ésta instruyó  al indio a que cortara tantas rosas de castilla como pudiera de la cumbre del cerro y se las llevara al sacerdote; así lo hizo y guardó las rosas dentro de su tilma o ayate  (tipo de toga abierta por los lados). Se dice que al estar Juan Diego frente a Zumárraga abrió el ayate y se mostró impresa la imagen de la virgen (12 XII 1531).

 El culto a la virgen de Guadalupe se extendió rápidamente entre la población india por dos razones, ella mostraba rasgos indígenas y el cerro del Tepeyac era un antiguo lugar de culto para Tonantzin la madre de los Dioses, uno de los nombres de Coatlicue -que por cierto era una Diosa bastante sanguinaria-.

 El relato hace agua por todos lados desde el punto de vista histórico, y no voy a hacer un tratado de todas las contradicciones que contiene,  baste decir que el obispo Zumárraga, que anduvo de inquisidor y al menos mandó quemar a un hereje, en ninguno de los libros que publicó después de los supuestos hechos menciona a la virgen y antes bien se pregunta en uno de ellos ¿Por qué Dios ya no hace milagros?

 Desde el siglo dieciséis fueron varias las personas, incluyendo sacerdotes, que se oponían a la farsa Guadalupana a todos ellos se les presionó con cárcel ó torturas para que se desdijeran.  El obispo Sánchez Camacho autor del epígrafe del principio se tuvo que esconder  porque la policía de Porfirio Díaz lo amenazó por sus declaraciones.

 El escándalo más reciente corrió por parte del encargado por 33 años de la basílica de Guadalupe Abad Guillermo Schulenburg que en el 2002 se los dijo con todas sus letras. Juan Diego no existió y la virgen es un símbolo  de la madre de Dios. Urbi et orbi se escuchó un grito de “pendejo” de parte de la jerarquía católica porque les estaba matando la gallina de los huevos de oro. El santuario de Guadalupe recibe veinte millones de peregrinos al año y después de la Basílica de San Pedro en Roma es el lugar de culto más visitado de la cristiandad. Las declaraciones del abad se inscriben dentro de un pleito entre gangsters porque el episcopado mexicano quería administrar los dineros y el delegado de Roma quería seguir enviándolos  al Papa. A pesar de la evidencia histórica San Juan Diego fue canonizado en el 2002 por Juan Pablo II porque al parecer tuvo un abogado del diablo muy a modo.

*No hizo cosa igual con ninguna nación. Papa Benedicto XIV a propósito de la Virgen de Guadalupe.

sábado, 23 de mayo de 2009

El poder detrás del trono




"Religio peperit scelerosa atque impia facta" La religión ha parido empresas pérfidas e impías.

Titus Lucretius Carus

El señor del retrato era el Obispo de Puebla, México allá por mediados del siglo XIX y respondía al nombre de Antonio de Labastida y Dávalos; en ese tiempo los indios zacapoaxtlas se rebelaron contra el gobierno al grito de ¡religión y fueros! Cosa que motivo una investigación para averiguar quién les había enseñado esos conceptos tan castizos y dado dinero para comprar armas.

Pues resultó que el que los mandó a la guerra no fue otro que Don Antonio que estaba muy interesado en que a la pobre Iglesia Católica, no le quitaran sus pocas tierras que poseían y que no sumaban más que la mitad de las propiedades inmobiliarias del país, ni que se metieran con sus diezmos obligatorios, ni con sus otros santos negocios.

El caso es que el gobierno no vio con mucha simpatía el hecho, e invitó al Sr. Obispo a darse una vuelta por Europa en calidad de exiliado, cosa que aprovechó nuestro sacerdote para irle a ofrecer la corona de emperador de México a Maximiliano de Habsburgo Archiduque de Austria. Así que Don Antonio regresó a México, y fue expulsado de vuelta cuando se le vino abajo el sueño del Imperio, por lo que hasta que Porfirio Díaz se vuelve presidente de México se le permite el reingreso.

Pues resulta que Porfirio Díaz estaba casado con una hija de su hermana, es decir con su sobrina carnal, algo que resultaba muy irregular, tanto así que le tuvieron que dar una dispensa para poder casarse por las leyes civiles. Delfina que así se llamaba su sobrina-esposa le había dado seis hijos, de los cuáles los primeros tres murieron a temprana edad, situación que ella atribuía a un castigo del cielo ya que vivía en pecado con su familiar; así que desde los primeros años de matrimonio se volvió algo beata para compensar el sentimiento de culpa.

Con su último parto Delfina tuvo muchos problemas, la niña se murió y a ella la desahuciaron por lo que mandó llamar a su confesor, que no era otro que Don Antonio Labastida, el cual no le ponía peros para que comulgara, pero le negó la extremaunción y le aseguró que se iba a ir derecho al infierno por vivir en pecado con un hombre con el que no se había casado por la Iglesia y que encima era su tío.

Delfina desesperada por la perspectiva del fuego eterno le suplicó al Arzobispo que la casara in articulo mortis, pero el obispo pidió antes de dar su decisión hablar con el presidente, al que le fue con la misma historia del pecado y la ira de Dios. Para no hacer el cuento largo el sacerdote aceptó bendecir la unión y darle pase automático al cielo a Delfina a cambio de que Don Porfirio renegara del juramento que hizo de defender la constitución de 1857 que claramente limitaba el poder de la Iglesia y la despojaba de sus canonjías. Díaz que al parecer si quería a su esposa y también era católico practicante no tuvo más remedio que aceptar y hasta lo puso por escrito.

Pues como decían al final de la película Casablanca, ese fue el comienzo de una buena amistad, en los siguientes veinticinco años de gobierno entre la Iglesia y Díaz se encargaron de darle marcha atrás a las leyes de Reforma que tanta sangre le había costado al país.

A ver Don Antonio, instigó una guerra civil, quiso regalarle el país a una corona extranjera cuándo no había pasado ni medio siglo de la Independencia de México, y se volvió con sus mentiras el poder detrás del trono para evitar que se le pusiera coto a los excesos del catolicismo. ¿Sabe qué? Se ganó la condenación eterna. 



viernes, 22 de mayo de 2009

Pope2You


El Papa Benedicto XVI ha ingresado en el mundo de las redes de contacto social y teléfonos inteligentes con un portal del Vaticano que incluye aplicaciones de Facebook y iPhone.

El portal Pope2You.net fue lanzado el martes y permite a los usuarios de Facebook enviar postales virtuales con fotos de Benedicto. Una aplicación para iPhone e iPod Touch da a los usuarios noticias en video y audio sobre los viajes y discursos del Pontífice, además de acontecimientos de la Iglesia católica en todo el mundo.



jueves, 21 de mayo de 2009

Miserere mei Deus


El título de ésta entrada se refiere al Salmo 51, Dios ten compasión de mí, la Inquisición ordenó que se recitara mientras Morelos era azotado como parte

del castigo que se le aplicó por hereje.

El próximo año se celebra en México el bicentenario del inicio del movimiento de Independencia de México y el centenario de la revolución mexicana; y hay muchos que quisieran montarse en el caballo de éstos festejos. Así que no es de extrañarse la nota aparecida en el Periódico Universal del día 14 de Mayo del 2009; Alfredo Vargas Alonso, rector de la Universidad Pontificia de México, propuso que la Secretaría de Educación Pública (SEP) modifique los libros de texto para que se detalle la participación de la Iglesia católica en la Independencia y la Revolución.

Va a ser interesante ver el tratamiento histórico que nos va a presentar la Iglesia acerca de la intervención de sacerdotes en éstos movimientos.

Por ejemplo; si bien es cierto que Hidalgo y Morelos, sacerdotes ambos fueron cabeza del movimiento que culminó con la Independencia de México. La Jerarquía Católica en ningún momento apoyo sus acciones; de hecho, las autoridades no hubieran podido ejecutarlos sin que le precediera a su juicio civil uno eclesiástico hecho por el Santo Oficio, donde fueron degradados de su investidura en una ceremonia que involucraba, entre otras humillaciones y torturas rasparles las manos con un cuchillo.

“Te arrancamos la potestad de sacrificar, consagrar y bendecir, que recibiste con la unción de las manos y los dedos”, se les dijo en el acto.

Después de sendas ceremonias, los reos fueron entregados para su ejecución con el consentimiento del Santo Oficio. A los soldados encargados de los fusilamientos se les dijo que recibirían la bendición de Dios por sus acciónes, para calmar sus resquemores por asesinar a un sacerdote.

La Universidad Pontificia no es heredera de Hidalgo y Morelos, sino pertenece a la misma estructura que los condenó, por lo que se percibe como oportunista la sugerencia de modificar los libros de texto para resaltar el papel del catolicismo.

Por lo que respecta a la Revolución Mexicana, no salgo de mi asombro, muchas de las condiciones para que se diera el estallido social son consecuencia del contubernio entre el dictador Porfirio Díaz y la jerarquía católica, baste recordar que rompiendo el secreto de confesión en muchas ocasiones los sacerdotes le pasaban información al gobierno acerca de posibles conspiraciones, condenando así a los que inocentemente confiaban en ellos.

El chisme de cómo Porfirio Díaz que había empezado su carrera como liberal y había jurado respetar la constitución del 1857 pasó a aliarse con la Iglesia; que se sirvió de él para recuperar los privilegios que había perdido con Juárez y Lerdo de Tejada, está muy sabroso. Por lo que lo dejo en el tintero para mejor ocasión

Bibliografía Sierra Partida, Alfonso. Perfiles de grandeza en la historía de México, Departamento del Distrito Federal, México, 1978.

lunes, 18 de mayo de 2009

Arzobispo de Guadalajara



Dicen que a partir de los cincuenta la gente tiene la cara que se merece. El Señor de la fotografía es el Arzobispo de Guadalajara, México Juan Sandoval Iñiguez; y nos muestra el resultado de una vida de templanza; humildad, abstinencia, caridad, castidad, piedad y el resto de las virtudes morales, teologales ó cardinales que no me acuerdo. Aunque claro está yo no soy Doctor en Teología como éste dilecto personaje.

El Excmo. es el sucesor del Cardenal Posadas Ocampo que fue acribillado en el aeropuerto de Guadalajara; según el gobierno porque lo confundieron con un capo del narco, aunque Sandoval sostiene que fue un crimen de estado del que afirma tener pruebas que tiene quince años prometiendo mostrárnoslas.

Transcribo algunas declaraciones –verdaderas perlas de sabiduría- que el Arzobispo nos ha regalado a lo largo de los años ejerciendo su obligación de dirigir y cuidar al pueblo cristiano.

“No hay rico que sea honrado. El rico es ladrón o hijo de ladrón...si trabajando se hiciera uno más rico, los burros serían los ricos"

Tomando en consideración que él habita una lujosa residencia que cuenta con gimnasio; alberca techada, capilla, biblioteca de buen tamaño y hasta animales exóticos, su gusto por el golf y por los clubes privados exclusivos, habría que preguntarle ¿en su caso, quién es el ladrón?

"Se necesita no tener madre para ser protestante", frase que no fue interpretada correctamente por Los Testigos de Jehová y otras iglesias que por alguna razón se sintieron ofendidos.

"Las mujeres no deben de andar provocando, por eso hay muchas violadas" no comments.

Sobre los homosexuales, precisó que "las desviaciones de algunas personas no deben servir para condenarlos, pero tampoco para presumirlas; que las mantengan más bien en secreto".
José Barba, quien hace una década inició una serie de denuncias por pederastia contra el padre Marcial Maciel, afirma que ya es tiempo y es justo que den la cara los jerarcas católicos mexicanos –entre ellos menciona a Sandoval Iñiguez- quienes incondicionalmente se pusieron en contra de nosotros, sin tener ni buscar información aclaratoria”. Lo que pasa es que predicando con el ejemplo se trataba de mantener las cosas en secreto.

“Hijos de las tinieblas” epíteto dirigido a los militantes de un partido de izquierda. El Arzobispo, qué como bien se ve está del lado de la luz, ha sido investigado por lavado de dinero por sus nexos con capos del juego y actualmente está en medio de una polémica debido a que el Gobernador de Jalisco le ha hecho donaciones millonarias a la Iglesia Católica a costa del erario público.

Por todo lo anterior yo me pregunto; ¿qué pensaría Jesús de su pastor en México?.